Nº V.

sábado, 5 de mayo de 2012

Ser tonto o no ser tonto, esa es la cuestión...

Ese cosquilleo que sientes al verle, esas ganas de oír su voz, ver sus ojos con esa mirada al infinito de tus ojos, sus caídas patosas enfrente de ti, la risa tonta que te cautiva interiormente, tus ganas de querer que empieze a hacer frío para sentir su cuerpo junto al tuyo, las ganas de poner una canción lenta para que vuestras miradas se crucen y seguidamente te bese, como siempre habías soñado. Es una sensación estraña, al imaginar todo esto piensas que son tonterías absurdas que solo los tontos podrías pensar, pero todos sabemos que solo los tontos se enamoran.

No hay comentarios:

Publicar un comentario